El hígado es un órgano vital debido a la multitud de funciones fundamentales que tiene que realizar para el correcto desarrollo de nuestro organismo, como la síntesis de proteínas plasmáticas, función desintoxicante, almacenaje de vitaminas y glucógeno o secreción de bilis, entre otras.
El hígado es vulnerable a los malos hábitos de vida y la ingesta de sustancias tóxicas, medicamentos y el alcohol. A lo largo de nuestra vida, a causa de los errores dietéticos, la utilización de fármacos, la ingesta de alcohol o el estrés diario, el hígado puede saturarse o llegar a degenerarse. Cuando el hígado se satura no puede hacer sus funciones correctamente y las toxinas se acumulan en el resto del cuerpo generando trastornos y afecciones al resto de los órganos. El dolor abdominal, el color amarillo de la piel o los ojos (ictericia) y los resultados anormales de las pruebas de la función hepática pueden sugerir una enfermedad hepática.
La cirrosis, las hepatitis o el hígado graso, son los problemas más comunes.
Síntomas de enfermedad de hígado
- Dolor y malestar hipocondrio e hipogastrio (boca del estómago), nervios en el estómago.
- Sensación de nudo en la garganta.
- Suspiros frecuentes (sensación de falta de aire).
- Problemas ginecológicos: Síndrome premenstrual agudo, problemas menstruales, miomas, tensión mamaria.
- Sabor amargo en la boca.
- Dificultades digestivas, en especial para digerir las grasas.
- Falta de energía, fatiga.
- Colesterol en sangre.
- Alteraciones en la piel.
- Dolores de cabeza, cefalea, migraña.
- Ansiedad y Depresión.
- Cara y ojos rojos.
Mantener nuestro hígado en buen estado, es fundamental para tener un estado óptimo de salud. Dada su vital importancia, durante décadas se han desarrollado diferentes técnicas para depurar, desintoxicar y drenar el tejido hepático.
Enfermedad de hígado y Medicina Tradicional China
Según la Medicina Tradicional China, el hígado está emparentado con la Vesícula Biliar y la energía Madera. La Medicina China atribuye al Hígado las siguientes funciones y características:
1. Almacena la Sangre: Regula la cantidad de sangre total del cuerpo, esto se refleja dos aspectos:
- La actividad física: cuando el cuerpo está en descanso, la sangre vuelve al Hígado; cuando la actividad muscular es intensa, la sangre almacenada en el Hígado fluye por el cuerpo nutriéndolo e hidratándolo, especialmente los músculos, tendones, ojos, y uñas.
- La menstruación: cuando la sangre del Hígado es deficiente habrá amenorrea, y si la sangre de Hígado está bloqueada, habrá dolor menstrual.
2. Asegura el flujo uniforme del Qi: Se dice que la energía del Hígado circula “en todas direcciones”. Cuando el Qi circula libremente, el estado emocional es estable. Cuando el Qi está bloqueado, hay irritación, frustración, depresión… Tiene además una gran influencia sobre la circulación del Qi del Estómago y del Bazo, es decir, sobre la digestión, pues según los cinco elementos, el Hígado (Madera) controla a la Tierra (Bazo y Estómago): si el Qi de Hígado se obstruye, puede provocar náuseas, vómitos (el Qi de Estómago no puede descender, y se rebela hacia arriba), diarreas (el Qi de Bazo no puede ascender).
3. Controla los tendones y ligamentos: El Hígado almacena la sangre, pero si el Hígado no tiene sangre suficiente para nutrir los músculos y tendones, aparecen temblores, contracturas o calambres, tics, dolores articulares y musculares, adormecimiento de miembros, torpeza, etc.
4. Se manifiesta en las uñas: Cuando el hígado está débil, las uñas son delgadas, frágiles, secas, deformadas y se astillan.
5. Tiene su apertura en los ojos: El Hígado controla la visión y los movimientos oculares, así que si se debilita habrá: ojos secos, visión borrosa, miopía, hipermetropía, sequedad, etc.
6. Alberga al Hun: A nivel psíquico el Hígado, a través del Hun, rige el subconsciente, la intuición, los sueños, la creatividad, la imaginación (el hígado es el gran estratega), la iniciativa y el el coraje. Cuando su energía es excesiva aparece la ira. Cuando está debilitado aparece falta de imaginación, falta de motivación, poca iniciativa y estados de ansiedad.
Un hígado congestionado, dañado, no es capaz de llevar adelante todas estas funciones que le son propias, por lo que
Fitoterapia China Tradicional
Para un equilibrio general del hígado, la Medicina Tradicional China estudia una fitoterapia completamente novedosa que consta de dos pasos; el primer paso basado en la depuración integral del hígado y de un segundo paso más específico, una regeneración integral, de el tejido hepático dañado.
En la MTC la depuración del hígado es indispensable para cualquier tratamiento y mantenimiento del sistema digestivo y endocrino.
- 1º PASO; DEPURACIÓN INTEGRAL: Tanto en la Medicina Tradicional China como en el naturismo occidental, se han estudiado durante cientos de años plantas para una depuración integral del hígado, un drenaje y descongestión del tejido hepático. Boldo (Peumus boldus Molina), Salvia (Salvia officinalis L.), Angelica (Angelica sinensis Diels), Genciana (Gentiana lutea L.), Bupleurum (Bupleurum chinense DC.), Alcachofa (Cynara scolymus L.), Grosellero (Ribes nigrum L.).
- 2º PASO; REGENERACIÓN INTEGRAL: En Medicina Tradicional China se estudia una exquisita mezcla de plantas para una estimulación de los vacíos energéticos y decrepitud propios de lesiones hepáticas más avanzadas, es decir, para una regeneración de los tejidos dañados. Salvia (Salvia officinalis L.), Angelica (Angelica sinensis Diels), Canela (Cinnamomum aromaticum Nees), Jengibre (Zingiber officinale Roscoe), Peonía (Paeonia lactiflora Pall.).
NOTA importante:
En biología no puede hacerse una división exacta entre un estadío y otro en el estado del tejido hepático, por lo que un proceso de depuración no puede separarse de uno regenerativo ni viceversa. Por tanto, lo ideal será conjugar ambas fitoterapias, la depurativa y la regenerativa.
Otras recomendaciones
Llevar una dieta adecuada.
- Alimentación rica en caldos vegetales, verduras de hoja verde, cereales integrales y proteína vegetal.
- Hacer énfasis en Sésamo, Cebada, Centeno, Mijo, Maíz, Arroz, Cereza, Fresa, Manzana, Uva, Melocotón, Limón, Ciruela, Higo, Patata, Tomate, Col, Rábano, Apio, Alcachofa, nueces, algas Kombú.
- Contraindicaciones: Alcohol, azúcares, proteínas animales, lácteos, alimentos procesados, especias, picante.
Es también muy importante beber mucho líquido, ya sea en forma de agua, caldos o infusiones (té verde).
Hacer ejercicio regularmente.
Controlar los niveles de estrés.